Critica menos, empatiza más
Sin saber aún bien sobre qué escribir, acabo de escuchar un comentario de crítica prácticamente sin fundamento. Esto me ha hecho reflexionar.
Probablemente, todas y todos estemos rodeados de personas que viven su vida desde la crítica constante: "mira lo que hace fulana", "qué ridículo hace fulano", "no sé cómo puedes hacer las cosas de esa manera tan absurda", "eres tonta", "no vales para esto", "no deberías comer eso", "vuelve a casa y vístete de una manera más decente", etc, etc y un largo etc.
Probablemente, de la misma manera que observamos esto en los demás, nosotras y nosotros mismos hemos o somos partícipes de este tipo de comentarios casi sin darnos cuenta. ¿Cuántas veces hemos podido decir una frase por el simple hecho de opinar? Reflexiona un momento sobre esto y reformula la pregunta. ¿Cuántas veces hemos podido decir una frase por el simple hecho de opinar, sin ser apenas constructiva?
"Si lo que vas a decir no es más bello que el silencio, no lo digas"
Subestimamos el poder de la palabra y las
secuelas que ésta crea. Tanto positivas como negativas.
Si integramos un modelo de relación con el
mundo basado en la crítica, seguramente nos estemos alimentando de la crítica y
sea la manera en la que nos relacionamos con nosotras y nosotros mismos. Uno
critica lo que no acepta de sí mismo. Y el rechazo es una crítica encubierta,
ya que aceptar ese aspecto personal sería motivo de crítica personal y machaque
continuo. Por eso, nos resulta más "sencillo" proyectarlo en aspectos
del mundo exterior y "desahogar" nuestra crítica en ellos.
Céntrate en la observación/autoobservación
de tu mundo externo e interno y la manera "natural" que tienes de
relacionarte en éstos. Es decir, la que hoy en día te nace sin apenas tomar
conciencia de ella. Observa tus mensajes para con las personas que te rodean,
autoobserva los diálogos internos en los que se retroalimentan tus
pensamientos. El objetivo principal es encontrar en qué se fundamenta tu
crítica y tomar conciencia de tus aspectos personales rechazados. Esta
reflexión va más allá de la conocida recomendación de "hablarnos
mejor". Quizá esa sea la consecuencia del trabajo a realizar, pero si
vives desde la crítica y tratas de cambiar únicamente tu lenguaje verbal,
sentirás el cambio como una obligación y un compromiso desde el control
que, tarde o temprano, fracasará.
Por lo que, céntrate primero en la escucha
interna y en la toma de conciencia y el cambio será una consecuencia
posterior. Es un trabajo difícil pero muy sanador.
Recuerda:
Todo lo que sale de ti hacia los demás, antes ha pasado el filtro de nacer de ti para ti misma/o.
Eres con los demás de la misma manera en la que eres contigo.
Todo nace en nuestro interior.
Todo lo que sale de ti hacia los demás, antes ha pasado el filtro de nacer de ti para ti misma/o.
Eres con los demás de la misma manera en la que eres contigo.
Todo nace en nuestro interior.
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